lunes, 12 de septiembre de 2011

PSICOLOGÍA HUMANISTA: SÍNTESIS


El siguiente constructo es una muy breve síntesis sobre la psicología humanista:

La Teoría Humanista tiene su origen en las corrientes filosóficas del existencialismo y la fenomenología. Es llamada la tercera fuerza porque surgió como alternativa ante las escuelas del psicoanálisis y el conductismo. El modelo humanista considera al ser humano como un todo, único e irrepetible que se desarrolla como ser creativo. En este sentido, el individuo está llamado a la bondad y tiende de manera natural a la autorrealización, que en último término no es más que la felicidad. Todo en nuestra consciencia y en nuestro ser es integrador y se ve influenciado por lo que existe, por eso es una teoría encarnada en la realidad. En el ser humano no hay dualismo; nuestro cuerpo no es más que la pura expresión del alma. La Teoría Humanista se plantea como medio para llegar al equilibrio: el cultivo de lo emocional, de lo intuitivo y de lo contemplativo. Y finalmente reconoce al individuo como ser que es intersubjetivo, que se interrelaciona y reconoce la importancia de la alteridad.

Es importante destacar, como este modelo se diferencia claramente de las otras corrientes, por su visión integradora de las distintas áreas (intelectual, emocional, corporal y espiritual). Concibe a la persona como una totalidad; por la consideración del hombre como dotado de todas las potencialidades necesarias para su completo desarrollo. por la visión del síntoma y de la enfermedad como la manifestación externa de un conflicto interno (potencialidades no desarrolladas) (tomado del documento: Trasfondo Filosófico y Epistemológico de la Psicología Humanística).

El modelo humanista concibe al hombre, como aquel vive de acuerdo a su realidad subjetiva y personal, en la cual construye su personalidad, cuyo núcleo es el sí mismo y que esta siempre orientado a la autorrealización. En la medida en que consolida su autorrealización adquiere el autoconcepto y la autoimagen, que están demarcadas por la libertad que le permite establecer una relación íntima con sí mismo y con lo que le rodea; frente a esto siempre asume una actitud creativa. Es capaz de establecer una estructura de valores que le permiten solidificar su personalidad y convertirse en un ser eminentemente holístico.

El método por excelencia de la psicología humanista es el fenomenológico el cual supone que cada persona nace con una potencia para el desarrollo y que ésta proporciona el motor de la conducta; en definitiva esto será lo que observe este modelo, partiendo de la introspección como la capacidad que el cliente tiene de volver sombre sí mismo de forma activa para poder desarrollar sus potencialidades. El método fenomenológico se dirigirá entonces a estudiar la totalidad de la persona humana y la esencia de sus conductas desde su propia individualidad.

En cuanto a las bases sociales de la escuela humanista es importante rescatar la aportación de Adam Smith en Wealth of Nations de 1776, quien propuso un interés de la sociedad, mediante la inteligente prosecución del interés individual. La persona que reconoce sus más intensas necesidades y busca gratificarlas, está actuando de manera espontánea en beneficio de la sociedad. Así pues “La gente logra un alto grado de satisfacciones de índole fundamental, como para buscar luego amor y respeto (más que sólo alimento y seguridad); tiende a desarrollar cualidades como la lealtad, la amistad, la conciencia cívica; por tanto, simultáneamente serán buenos padres de familia, esposos, maestros, empleados públicos, etc. Los intereses privados y los sociales son, en condiciones comunitarias saludables, sinérgicos, nunca antagónicos.” (tomado del documento Bases Sociales de la Psicología Humanística o Tercera Fuerza).

Por: John Mario Zapata Peña

No hay comentarios:

Publicar un comentario